El COVID-19 ha acelerado los procesos de transformación digital en las empresas. También ha puesto de manifiesto carencias en las organizaciones, sobre todo, de estructura para afrontar los cambios. En pocos meses, muchas de ellas se han visto obligadas a adoptar procesos que hubieran tardado años en hacerlo. Un nuevo escenario que requiere organizaciones flexibles, en una palabra, empresas ágiles y, además,  datacenter ágiles.

Data Center Ágiles

Tal ha sido la contundencia de esta crisis sanitaria que el Foro Económico Mundial habla del Gran Reinicio, The Great Reset, en inglés- y pone el foco en la digitalización y la sostenibilidad para afrontar esta reconstrucción. Se trata de repensar el modelo económico y apuntalarlo para futuras crisis y, para ello, la flexibilidad y la tolerancia al cambio son fundamentales. Difícilmente se puede acometer la transformación digital en organizaciones con estructuras pesadas y los recursos IT juegan un papel fundamental.

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Disponer de una infraestructura de centros de datos flexibles, que evolucione con la organización y adaptarse a los cambios con agilidad resulta crítico en estos momentos.

Arquitectura data center ágil

El quid de la cuestión estriba en dotarse de arquitecturas escalables que puedan configurarse y gestionarse de forma sencilla. Las arquitecturas de data center basadas en software  proporcionan este esquema y, además, permiten:

• Creación de máquinas virtuales y ajuste de la capacidad y el uso
• Virtualización de los recursos de almacenamiento, informáticos y de red con opción a una gestión integral del cloud.
• Reconfiguración de la estructura de acuerdo con el proyecto que se trate sin cambiar los recursos del centro de datos.

Buscar la máxima flexibilidad en los recursos – como la red, computación y almacenamiento – y el software como los servicios virtuales o el análisis de los datos puede determinar la adaptación a los cambios que estamos viviendo.

Metodología DevOps

Almacenamiento, servidores, redes y seguridad. Son los cuatro pilares de las infraestructuras de un centro de datos. Sin estructuras ágiles, todos estos elementos de la infraestructura de un data center acaban siendo elementos individuales, cada uno con sus exigencias y requerimientos.

Para integrarlos en una gestión conjunta, como si de un todo se tratara se necesitan metodologías como DevOps que permiten:

• gestión de la infraestructura de manera rápida
• eficiencia del tiempo en el desarrollo de software
• facilita la interoperabilidad e independencia de componentes
• capacidad de automatizar la infraestructura
• disminución de errores por configuración manual

En este nuevo reinicio del que hablábamos, la automatización y la digitalización marcarán la adaptación a escenarios cambiantes y desconocidos, como, a una pandemia, por ejemplo. Ya se ha visto como los centros de datos se han convertido en infraestructuras esenciales durante esta crisis sanitaria, dotarlos con metodologías y arquitecturas ágiles puede ser el factor que determine su resiliencia ante futuras crisis y, en este punto, mejor no anticipar. Ya hemos visto cómo la realidad puede superar a la ficción.